Los Ibaguereños no aguantamos más el alto nivel de desempleo que actualmente vivimos. Una ciudad que, gracias a su ubicación geográfica y conexión a otras regiones del país, no tiene hoy el desarrollo que debería tener. Lastimosamente hoy estamos en el segundo lugar de desempleo conforme lo señala el Departamento Nacional de Estadísticas –DANE con un porcentaje de desocupación del 17,5%, solo detrás de Quibdó que se encuentra con un 24,7%.
Por lo anteriormente expuesto, es muy triste para nosotros los jóvenes tener que emigrar a otras ciudades como Bogotá, Medellín, Barranquilla para poder tener una estabilidad laboral fortaleciendo así estas capitales con nuestro conocimiento y experiencia en los distintos perfiles profesionales técnicos y tecnólogos, en vez de transmitir todo lo anterior en beneficio de las empresas locales y contribuir al desarrollo de nuestra amada Ibagué.
Ahora bien, a raíz de esta problemática, podemos ver el alto nivel de informalidad, que sin duda alguna es una bola de nieve que va creciendo; ya son más de 130 mil familias sin oportunidad de tener una estabilidad laboral.
La administración municipal debería generar alternativas e incentivos para fomentar y fortalecer las pequeñas y medianas empresas, porque son ellos quienes dinamizan la economía de nuestra ciudad.
Por último, parece lamentable saber que nuestra ciudad hace unos años se caracterizaba por ser un importante productor textil que en su momento era la fuente de empleo más grande de nuestra Región y hoy esa fuente generadora de empleo e ingresos para nuestros ciudadanos se ha apagado, acabando con los esfuerzos y sueños de empresarios que llegaron a nuestra ciudad con las ganas de sembrar semillas de progreso.
Cierto es que a los ibaguereños no nos queda nada grande y tenemos la motivación por salir adelante a flor de piel, pero con la indiferencia de un gobierno que presume por hacer obras, pero ninguna propuesta e iniciativa en empleo podemos vislumbrar.
2022-10-28